¿Fotomultas a Escondidas? La Verdad Detrás de las Denuncias Ciudadanas

Bogotá es conocida como una de las ciudades más congestionadas del mundo, y la movilidad continúa siendo uno de sus retos más grandes. A esta problemática se suma otra que genera constante controversia entre los conductores: las fotomultas. Las “cámaras salvavida”, dispositivos de monitoreo en diferentes puntos de la ciudad, buscan reducir los accidentes de tránsito capturando en imagen a quienes exceden la velocidad o cometen imprudencias. Sin embargo, en las últimas semanas, Bogotá se ha visto envuelta en un debate sobre la legalidad y ubicación de estas cámaras, así como de las prácticas de control que algunos perciben como “trampas” para los conductores.

¿Qué son las ‘Cámaras Salvavida’?

Las cámaras salvavida fueron instaladas en puntos estratégicos de la ciudad con el fin de disminuir el número de accidentes de tránsito. Estos dispositivos, activos las 24 horas del día, registran a los vehículos que exceden los límites de velocidad, ayudando a identificar a los conductores que infringen las normas. Además de los beneficios en términos de reducción de accidentes, estas cámaras han levantado polémica entre los ciudadanos, especialmente entre aquellos que se ven sorprendidos con comparendos de fotomultas.

El punto de mayor controversia es la supuesta ubicación de algunas cámaras, que los conductores aseguran estar “camufladas” en andenes, puentes peatonales o separadores viales. La percepción es que se utilizan ubicaciones inesperadas, y por lo tanto, generan una sensación de “emboscada” para quienes transitan por las vías.

Videos Virales: Conductores en Alerta

En las últimas semanas, varios videos han circulado en redes sociales, donde se observa a personas con radares de velocidad tomando notas en puntos estratégicos de la ciudad, especialmente en avenidas como la Autopista Norte y la Avenida Boyacá. Las imágenes muestran a estos individuos sosteniendo dispositivos de medición de velocidad y apuntando los datos, una escena que generó descontento e indignación entre muchos ciudadanos, quienes cuestionaron si estas prácticas estaban dentro del marco legal.

Le puede interesar >>> Así funcionan las cámaras de fotomultas en Bogotá

La controversia se intensificó cuando usuarios de redes sociales acusaron a estas personas de llevar a cabo “fotomultas ilegales” al medir la velocidad sin que los conductores pudieran anticiparlo. El temor a una posible sanción en puntos tan particulares generó un gran revuelo y contribuyó a la viralización de estos videos.

¿Fotomultas ilegales o estudio de movilidad?

En medio del escándalo que provocaron los videos, surgieron aclaraciones sobre el propósito de los radares y el personal que los operaba. Según algunas fuentes, se trataba de empleados de empresas contratadas para realizar estudios de movilidad en la ciudad, y no tenían la autoridad para emitir comparendos ni para generar fotomultas.

A pesar de esta aclaración, la situación ha dejado dudas entre los ciudadanos. Hasta ahora, la Secretaría de Movilidad de Bogotá no ha emitido un pronunciamiento oficial, y las autoridades locales están bajo presión para aclarar los criterios y la legalidad de estas prácticas de control. La percepción de muchos conductores es que estos estudios no se diferencian lo suficiente de los operativos de fotomultas, lo cual sigue generando confusión y una creciente desconfianza en los sistemas de monitoreo vial de la capital.

La Controversia de las Fotomultas Camufladas

El tema de las “cámaras camufladas” no es nuevo, pero esta vez ha alcanzado niveles de discusión más altos. En Bogotá, al igual que en otras ciudades del mundo, el uso de cámaras de velocidad en puntos estratégicos es una práctica común, sin embargo, la colocación de cámaras en lugares inesperados o poco visibles genera una percepción de arbitrariedad. La Ley 1843 de 2017, que regula las fotomultas en Colombia, establece que las cámaras deben estar señalizadas de manera visible para los conductores.

La inquietud es si las prácticas observadas en Bogotá realmente cumplen con esta normativa o si, en cambio, podrían estar infringiendo los derechos de los conductores al no brindar una señalización clara.

¿Son realmente efectivas las cámaras de velocidad para reducir accidentes?

Uno de los argumentos en defensa de las cámaras salvavida es su eficacia en la reducción de accidentes de tránsito. De acuerdo con estudios realizados en diferentes ciudades, los puntos donde se han instalado estas cámaras presentan menores tasas de accidentes. Además, el control de velocidad permite una mayor seguridad para todos los usuarios de las vías, desde peatones hasta ciclistas, motociclistas y conductores.

Sin embargo, el impacto en Bogotá es cuestionable cuando el mismo sistema parece estar generando resentimiento. Según algunos expertos en seguridad vial, cuando los ciudadanos perciben que los mecanismos de control son más una fuente de ingresos que una medida de seguridad, la aceptación y efectividad de estos sistemas disminuyen. La clave, entonces, parece estar en generar mayor transparencia y comunicación sobre los objetivos de estos controles

Denuncian Fotomultas escondidas en Bogotá

Autor